No podéis iros de Asturias sin conocer la capital del Principado.
Aprovechad para visitar la ciudad, especialmente el casco antiguo y la catedral. Los domingos se celebra el tradicional Rastro de Oviedo en la zona del mercado del Fontán, donde podréis encontrar todo tipo de tesoros de segunda mano. Quién sabe lo que la magia esconde.
Además, podéis reservar mesa y comer en la Calle Gascona, el Bulevar de la Sidra de la capital asturiana. Eso sí, os aconsejamos echaros una siesta antes de partir a vuestro destino final.
Si sois madrugadores y queréis aprovechar el día, venid a pasear por el puerto y las calles de este hermoso pueblo marinero. Podréis comer en uno de los restaurantes más famosos y subir al Faro y disfrutar de las vistas y la naturaleza. Un gran plan para descansar y desconectar.
La recomendación de los novios: probad el rollo de bonito. ¡Espectacular!
Si queréis conocer lo mejor de la huerta asturiana y os alojáis cerca del Palacio de Agüera, os sugerimos que visitéis el mercado de Grado. Productos naturales de pequeños productores.
Disfrutad de la gastronomía local a través de estos pequeños puestos y de la hospitalidad norteña.